Preparan en Cámara de Diputados conmemoración del Bicentenario del Plan de Iguala

Ciudad de México.- Para conmemorar el Bicentenario del Plan de Iguala, la Consumación de la Independencia y la convocatoria al Primer Congreso Constituyente, se instaló en la Cámara de Diputados la primera mesa de trabajo interinstitucional, con el propósito de analizar esos hechos históricos en la conformación del Estado mexicano hace 200 años y su repercusión en la actual coyuntura de transformación.

El diputado Manuel Huerta Martínez (Morena), promotor de la propuesta, afirmó que retomar esos hechos registrados en 1821 es una oportunidad histórica para repensar, replantear, reconstruir y reconciliarnos como mexicanos en el crisol de lo que es nuestro país. “No debemos verlos como una historia vacía, sino reconocerlos como parte de nuestra vida cotidiana”.

Al inaugurar el encuentro, el legislador por Guerrero aseveró: “vamos a recordar la construcción del Estado mexicano hace 200 años. El Plan de Iguala con sus controversias, porque se dice que no fue resultado de una lucha armada, sino de un pacto, México está aquí después de esos años como un país libre”.

Propuso mejorar con base en nuestra historia y acontecimientos vividos para no repetir errores; por eso, esta es una oportunidad de oro para la generación que nos toca vivir este bicentenario.

Aclaró que no es hacer una fiesta fortuita porque ya llegó la fecha, sino repensar los hechos históricos en la actual coyuntura política. Tampoco implica hacer monumentos bonitos o fiestas vacías, sino sumar e involucrar a los ciudadanos de a pie y retomar su sentir sin abogar por las élites”.

Aseguró que estos acontecimientos son vigentes y son temas de nuestros días, que nutren y enriquecen el quehacer actual de todos los ciudadanos en el marco de una transformación nacional. Apuntó que no es el momento de criticar la historia, sino de reconsiderar y reconstruir en un ánimo de reconciliación nacional para crecer todos los mexicanos, en la pluralidad donde todos los colores ideológicos se expresen con una vocación democrática.

“El término de reconciliación no nada más es repetir un discurso vacío. Tenemos que olvidarnos de rencores, aunque la controversia debe darse en la pluralidad y ser capaces de entendernos, ser menos viscerales y con más conciencia de lo que se dice y hace”.

Se tiene que abandonar el golpeteo político para ser seres humanos más civilizados y aceptar nuestra historia como es, porque no podemos repetir los errores del pasado y en lugar de criticar, debemos de construir y no para enlodar los temas, sostuvo.