El DIF Estatal de Chihuahua, a través de la Dirección de Rehabilitación, aplicó por primera vez la Toxina Botulínica tipo A, en pacientes con Parálisis Cerebral Infantil (PCI), trastorno del movimiento que afecta el tono muscular por un daño ocurrido en el cerebro con mayor frecuencia antes del nacimiento y que genera una rigidez en extremidades y tronco.
La aplicación de la Toxina se realizó en el Centro de Rehabilitación y Educación Especial (CREE) ubicado en la calle Quinta y Samaniego, en la colonia Santa Rosa, de la capital del estado.
Fueron 53 pacientes con Parálisis Cerebral Infantil procedentes de 14 municipios, cuyas edades oscilan entre los 2 hasta los 18 años, identificados con espasticidad secundaria a padecimientos neuro-musculares o cerebrovasculares.
Este proceso de aplicación de la Toxina Botulínica A, se realiza con una inversión inicial de más de 200 mil pesos, correspondiente a una inversión anual que alcanzará más de 600 mil pesos con beneficio para niños, niñas y adolescentes con discapacidad de movimiento.
El DIF Estatal atiende a 300 pacientes con PCI en el estado, de los cuales, en esta ocasión fueron beneficiados un 16% con aplicación de la de forma intramuscular (en el músculo afectado) o subcutánea con dosis de acuerdo al tipo y severidad de la enfermedad, evitando el dolor y mejorando el movimiento.
Durante la aplicación estuvieron presentes la Lic. María Isabel Barraza Pak, directora general del DIF Estatal; Lic. Yolanda Erives Contreras, directora de Rehabilitación; el Dr. Juan Francisco Javier Gómez Hernández, coordinador general del Centro de Rehabilitación Integral de Querétaro y la Lic. Cinthia Aideé Chavira Gamboa, presidenta del DIF Estatal de Chihuahua.
Cinthia Chavira señaló que estas acciones constituyen una oportunidad de brindar una mejora en la calidad de vida y de los servicios que se ofrecen a la población más vulnerable procedente de distintas regiones de la entidad.
La Presidenta del DIF explicó que el éxito de este programa depende no únicamente de la aplicación periódica de la Toxina Botulínica, sino del puntual seguimiento a la terapia física de rehabilitación, por lo que llamó a los usuarios a atender todas las recomendaciones de los médicos.
La aplicación de la Toxina Botulínica tipo A permite la rehabilitación de los pacientes con algún trastorno motor del sistema nervioso que contraiga permanentemente algunos músculos, es decir, rigidez muscular en alguna parte del cuerpo, facilitando su terapia física y obteniendo mejores resultados en su recuperación.
Cabe señalar que dicho medicamento tiene un costo elevado en el mercado y solo puede ser aplicado por médicos especialistas. Por esta razón el DIF brinda esta atención a algunos pacientes cuya condición y calidad de vida podrá mejorar sustancialmente.
Será en el mes de noviembre de este mismo año cuando se aplique la segunda dosis a estos pacientes y se verá entonces el avance de su rehabilitación.
